¿Sabes a qué se refieren las personas cuando hablan de cocinas integrales? Una cocina integral es un espacio que, más allá de su aspecto gastronómico y deleitante, está pensado para ser lo más funcional posible. Hoy por hoy, tener cocinas integrales ya no es una opción sino un deber si se quiere estar cómodos y al corriente de la tecnología actual. La palabra clave aquí es la practicidad; el diseño de la cocina debe ser ¡práctico ante todo! Un buen accesorio por incorporar en este tipo de cocinas son los muebles ergonómicos pues fluyen en función de hacer de ese espacio un lugar donde pasar el rato y aprovecharlo al máximo; además, este tipo de accesorios añadirán mucho carácter y personalidad a tu santuario para el paladar. Para que un sitio sea funcional debe, a su vez, tener fáciles accesos entre por ejemplo el mesón y la nevera, la nevera y el lavaplatos, el lavaplatos y la estufa; ¿vas entendiendo la idea de integrar todo tu espacio? En homify encontrarás ideas que esclarecerán tu panorama.
Tu cocina integral podría tener muchos estilos; al final todo dependerá del tamaño del lugar -y de los estilos que mejor se acoplen a él- y ¡de tus propios gustos! Recuerda que la cocina es quizás uno de los lugares de la casa que mayor personalidad añaden al hogar y elige sabiamente pues renovar o crear cocinas integrales no necesariamente será tareas sencilla -ni poco costosa-. Podrás elegir desde estilos ultra modernos o minimalistas en los que menos es más hasta estilos más recargados. Recuerda que la tendencia minimalista es genial para cocinas muy pequeñas pues no requiere de demasiados elementos decorativos de grandes dimensiones. Otro estilo, que por estos días ha sonado con fuerza, es el estilo rústico; no olvides que esta tendencia te permitirá incorporar grandes cantidades de madera para así hacer de esta área común un espacio altamente acogedor e invitador.
Como ya lo hemos dicho, recurrir a un estilo minimalista podría favorecerte; sin embargo, existen otros cuantos truquillos que podrían dar la ilusión de que el lugar es más grande de lo que en realidad es. Lo primero es entender que, cuando un espacio es muy pequeño, el blanco -de forma casi inmediata- debería tornarse en nuestro mejor aliado. No olvides que contar con paredes blancas y pisos claros (ya sean de madera o de cualquier otro tipo de material reflectivo) hará que visualmente tus cocinas integrales no se vean muy apeñuscadas pues reflejarán mejor la luz. Sumado a esto, incorporar grandes entradas de luz -bien sea en el techo o en las paredes a manera de ventanas- brindará una óptima ventilación haciendo que el humo, los vapores, malos olores y la humedad no se encapsulen en tu diminuta cocina; la idea no es quedar oliendo a ajo las 24 horas, ¿o sí? Recuerda que las entradas de luz no solo ventilarán el lugar sino que darán la sensación de mayor amplitud. Si quieres tener una cocina integral pero no cuentas con muchos metros cuadrados entonces deberás -de entrada- poner como prioridad en tu lista la funcionalidad del lugar. Mientras tengas todo lo necesario para cocinar y hacerlo bien, lo demás vendrá por añadidura.