La decoración de habitaciones pequeñas debe siempre estar muy bien planeada, pensada y estipulada; pues, sin dudas, se trata de la zona más íntima de nuestras casas y, además, de la zona que -en teoría- debiese ser más armoniosa. ¿Tienes un dormitorio diminuto pero no vas a rendirte a la hora de tener dulces sueños y amplias ambiciones en él? En homify te mostramos cómo hacer una eficaz decoración de habitaciones pequeñas para que, al final, estas sean funcionales, bonitas y estéticas. Conoce todos los tips y consejos que tenemos por ofrecerte y aprende a dar estilo y vida a rincones diminutos.
Lo primero es entender que los colores -y tonalidades- demasiado oscuros harán lucir tus habitaciones -o cualquier otra área- más pequeñas de lo que incluso son. Así mismo, el paso de luz natural ingresando a tu habitación hará que luzca más amplia y fresca; factor que deberás tener muy en cuenta antes de elegir el material de, por ejemplo, ¡tus cortinas! No olvides que las cortinas translúcidas procurarán intimidad y privacidad pero, a la vez, dejarán que los hermosos y siempre favorecedores rayos del sol ingresen. Opta por superficies brillantes en las que la luz -artificial y natural- refleje mejor. Recuerda que los pisos hechos en madera clara son una genial opción pues:
1. Se trata de un material acogedor y hogareño.
2. Su tono claro da un efecto óptico que hace pensar que el lugar es más amplio de lo que es.
3. Es un material resistente y duradero que viene con muchos acabados por lo que amplia tu rango de opcione sy oportunidades en materia de decoración de habitaciones pequeñas, medianas o grandes. Ahora bien, pasemos a las alfombras; recuerda que, aunque estas son adorables, puede resultar estorbosas si estamos hablando de un área muy reducida y carente de metros cuadrados. Elige una cama con trazos rectos, pulidos y con una forma geométrica para que así no resulte estorbosa ni haga ver al sitio muy recargado. Recuerda que, al igual que tu piso, tus paredes deben ser claras para así ampliar, visualmente, la composición general de tu habitación.
Por último, ten en cuenta que el color blanco no solo es favorable en términos de espacio sino, también, en términos de la funcionalidad de los dormitorios. ¿A qué se va a un dormitorio? Como su nombre lo indica, se va a dormir ¡a relajarse! Según el estudio de los colores, de su simbología y de la psicología implícita en cada uno de ellos, el blanco es un color -en esencia- muy apacible y -por ende- muy apropiado para un dormitorio.
La decoración de habitaciones pequeñas debe ante todo ser funcional pero eso no quiere decir que no deba -o pueda- tener altas cantidades de contenido estético.¿Quién dijo que el buen gusto y el estilo no podían asomarse por espacios reducidos? Existen muchos accesorios o elementos decorativos que no te quitarán mucho espacio pero harán que tus habitaciones luzcan deslumbrantes y únicas. Hablemos primero de las almohadas; un elemento decorativo clave en toda habitación. ¿Recuerdas que aconsejamos que las paredes y pisos fueran claros? Entonces, ¿por qué no contrastar el blanco apacible con forros de almohadas coloridos, étnicos, eclécticos y demás? Que tus almohadas tengan estilo no te quitará centímetros ni, mucho menos, metros cuadrados pero sí añadirá mucha personalidad a tu espacio. Si tu cuarto es tan pequeño que no puedes contar con una mesa en la que almacenar tus objetos más íntimos ni donde poner una lámpara que ilumine el lugar entonces considera tus otras opciones:
1. Instalar mesas de noche flotantes.
2. Instalar lámparas colgantes. Recuerda que hasta un florero colorido puede hacer la diferencia sin quitarte mucho espacio. No olvides que incorporar elementos naturales en la decoración de habitaciones pequeñas las hará lucir mucho más frescas.
En caso de que tu cuarto sea diminuto ten en cuenta que la regla es: acomodar la cama cerca -o junto- a una pared en vez de ubicarla -no lo hagas- en el centro. Por último, recuerda que -ya sean tus almohadas, tus floreros, unos divertidos y originales vinilos o pegatinas instalados en tu blanca pared o demás- siempre deberás procurar que tu cuarto cuenten con un punto focal al que tu ojo se dirija cada vez y que prime en la jerarquía de la composición visual del lugar.