Anteriormente, la vivienda contaba con una estética pasada de moda, estancias independientes y poca luz. Se han eliminado las barreras arquitectónicas creando un espacio común entre el salón y la cocina, más amplio y lleno de luz. Se ha instalado un pavimento porcelánico imitando a la madera, se ha eliminado el gotelé alisando las paredes y pintándolas con colores claros y se han instalado unas tiras de LED por toda las estancias que aportan luz natural y dotan de modernismo a la vivienda.