En un terreno de 1400 m2 y cerca de 150 árboles se encuentra inmersa La Casa GS 62, Un proyecto que pretende crear una convivencia dinámica, espacial y formal entre la naturaleza y arquitectura.
El espacio geográfico en el que se ubica el proyecto se caracteriza por el marcado relieve descendiente que se prolongan hasta llegar a la laguna. La propuesta para esta vivienda es crear una relación directa con este entorno a través de la volumetría principal del conjunto, los materiales y las texturas utilizadas.
La ubicación del proyecto responde al respetar la vegetación preexistente, el cual la vivienda se encuentra distribuida en un esquema de “U” formando el patio central y principal como elemento articulador.