“Como
crear una vivienda unifamiliar, confortable, funcional y fuera de lo
convencional, en un lote con dimensiones de 4 x 69 metros y no morir en el
Intento”
Este fue
nuestro reto al desarrollar la casa Kaleidos.
La
proporción de 1 a 15 del lote entre su ancho y longitud no resultó un
impedimento para crear una vivienda Única, Innovadora, de gran espacialidad y
que hace de los materiales que la conforman sus mejores aliados para crear una
propuesta contemporánea que resuelve en 280 m2 una vivienda funcional de 3
recámaras.
Nuestra
propuesta:
Sacar provecho de las dimensiones y crear
en toda la longitud del lote una experiencia sensorial. Ir descubriendo espacio por espacio mediante
un recorrido sinuoso que nos lleve de la mano y que, en vez de tomar el camino
más corto al unir dos puntos, nos haga descubrir la vivienda poco a poco, todo
esto acompañado de cambios de materiales, escala, iluminación y transiciones
entre interior – exterior.
En el
lote existía una estructura que data de los años 70s que se encontraba en buen
estado y que decidimos incorporar al diseño readaptando su uso. Dado que la
materialidad del proyecto fue un elemento determinante para la imagen final,
decidimos definir claramente las dos épocas a través de sus materiales.
La parte
antigua conserva su carácter tradicional con dos espacios claramente
delimitados y cuyos muros y plafones están acabados en estuco con pintura y los
pisos son de pasta, característicos de la región.
La
estructura nueva se convierte en una caja interior monolítica con solo una
perforación semicircular estratégicamente ubicada para introducir iluminación y
ventilación natural.
Muros y
plafones son de concreto gris pulido al igual que el piso de la planta baja
donde se conserva el mismo acabado pulido, mientras que en planta alta el
concreto es martelinado creando una textura que le da una sensación más cálida
al espacio.
Dentro
de la casa no existen cerramientos o desniveles y los espacios privados y de
servicio se delimitaron con muros de cristal reflejante de tal modo que pueden
verse del interior al exterior y desde el exterior solo percibimos los
reflejos. Al igual que en un caleidoscopio una serie de espejos ubicados estratégicamente
dentro de un tubo crean una ilusión óptica, estos muros ayudan a crear un juego
infinito de reflejos que varían durante todo el día gracias a las luz y sombra
que aporta la perforación semicircular que se encuentra en el jardín interior y
la escalera escultórica para acceder al área privada.
Las dos
áreas principales que datan de distintas épocas se conectan a través de un
patio semicerrado que crea el primer receso del recorrido de los 69 metros y
sirve de transición entre las dos áreas, este patio es una pausa entre la
primera impresión y el espacio que estamos a punto de descubrir.
La
Solución arquitectónica de la Casa Kaleidos da como resultado una vivienda
única, contemporánea, llena de sorpresas y sensaciones espaciales que hacen de
la vida diaria un placer a pesar del reto de trabajar un lote con dimensiones
tan particulares.