Se trata de una rehabilitación completa de un antiguo piso
de los años 60, de 65m2 con una distribución actual de tres dormitorios.
Dentro de una total libertad creativa, la única premisa fue la económica, ya que se trataba de una segunda vivienda.
El diseño se basó en un módulo “cubo” de cocina, que articula todo el proyecto, gracias al cual conseguimos abrir el espacio, creando un conjunto diáfano de salón y cocina.
Gracias a los elementos estructurales existentes en la vivienda (estructura de hormigón visto) y a los nuevos materiales incorporados, logramos darle un estilo industrial-loft.