Una casa moderna ¡totalmente de ensueño!

Joelia Dávila Joelia Dávila
CASA ALFA, João Carlos Moreira Filho & Maria Thereza Terence João Carlos Moreira Filho & Maria Thereza Terence Casas modernas
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Cuando en el diseño de una vivienda se toma en cuenta el entorno que la rodea, cuando se construye paso a paso cada detalle con sumo cuidado, cuando cada lienzo, cada textura y color se imaginan como parte de un todo universal y la construcción se concibe como parte integral del paisaje, entonces la obra arquitectónica se convierte en obra de arte. Ese es el caso de la hermosa residencia que conoceremos hoy.

Esta casa es sin duda el sueño hecho de realidad de muchos. Sus espacios son amplios, luminosos y confortables, los ambientes creados son acogedores y funcionales, cada detalle irradia modernidad y estilo, y en todo momento se respira un aire de sofisticada elegancia.

Sus diseñadores se basaron en formas geométricas y una interposición de grandes volúmenes que se desbordan escalonados hacia una pendiente en el terreno, aprovechando las vistas para construir zonas recreativas fascinantes. Los elementos estructurales más atractivos como escalinatas, techos, ventanales y terrazas se desbordan en monumentales formas, texturas exquisitas y vistas impresionantes. Pero ¡ya basta de palabras! Mejor te invitamos a conocer de cerca esta maravilla.

Un poco más de cerca

En esta imagen a pleno sol podemos apreciar con mayor detalle el acceso a la casa. Una escalinata en diagonal atraviesa curiosamente el jardín en pendiente, comunicando el sendero vehicular con el umbral peatonal. Un amplio corredor nos conecta directamente con la gran terraza.

La cálida paleta de colores en las piedras que revisten la entrada resaltan sutilmente entre el cremoso color del conjunto, y a la luz del sol la construcción se levanta majestuosa pero discreta, y en ese detalle radica su espectacular belleza.

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Interiores de ensueño

La elegancia en los interiores es fantástica. La gran estancia a doble altura recibe una radiante luz desde el techo, desde el gran ventanal vertical que da hacia la fachada principal y desde la gran terraza que se asoma al horizonte.

Los colores interiores siguen la gama exterior: colores cálidos, una paleta de marrones, cremas y destellos blancos, con toques de brillante color pertinentes y discretos, como las dos sillas amarillas. El piso de madera es impresionante: glamouroso y absolutamente acogedor, y la gran alfombra del mismo tono cierra el cuadro con una tentadora invitación al descanso y el relax.

Otro vistazo a la gran zona social

Hacia el lado opuesto podemos apreciar un murete con chimenea de gas integrada, que a la vez divide la estancia del comedor. La doble altura se presenta únicamente en la sala, por lo que el gran muro superior puede engalanarse con una obra plástica de gran formato, integrando arte y sorpresa al lugar.

Sin salirse de la gama de colores, entre los muros blancos, los portones de madera, la piedra de medios muros y la cancelería y mobiliario negro, el gran cuadro se presenta impresionante y fantástico.

La vista del comedor

La terraza lateral se ubica a lo largo de todo el costado de la casa, y cada área se comunica con ella por medio de un largo muro de vidrio y puertas deslizables. Aquí nos encontramos en el comedor. El diseño del mobiliario contempló elementos de corte contemporáneo sin dejar de lado la comodidad, así como detalles un tanto rústicos o, por otro lado, extremadamente modernos, creando una atmósfera ecléctica irresistible.

​Vayamos ahora a la famosa terraza lateral

¡Vaya, es simplemente espectacular! El espacio ocupa todo el predio en sentido lateral, haciendo posible la construcción de una larga piscina, una amplia zona de asoleamiento, jardineras y áreas sombradas para funcionar como terrazas.

La alberca colinda con la zona de vegetación más densa del lugar, y debido a su altura parece que se posa sobre ella, convirtiéndose en un mirador para admirar y disfrutar del paisaje pero desde la comodidad de un chapuzón.

Sorpresas en la estancia

Una de las puertas de madera deslizable de la estancia comunica con esta sala multimedia, vestida con un confortable sillón semicircular y dos butacas laterales. La gran pantalla al centro, el sistema de sonido y la tenue luz, además de la posibilidad de cerrar el espacio para mantener la iluminación indicada a la hora de disfrutar del cine, hacen de este lugar uno de los favoritos.

Otro lugar favorito

Pero si la sala de cine es uno de los lugares favoritos de casa, ¡este no puede dejar de serlo! La vinatería o salón de vinos es simplemente irresistible. Una gran cava deja siempre a la mano la envidiable colección de las mejores botellas, y una terracita con un cómodo sofá invita a pasar las mejores tertulias y brindar por los mejores momentos.

Como parte del paisaje

La construcción de esta vivienda se concibió como parte integral de un hermoso paisaje, de eso no cabe duda: los colores, las formas, el manejo de los desniveles y las texturas la integran a un horizonte de exuberantes formas y frondosos alrededores, senderos sinuosos y atardeceres increíbles.

En el diseño destacan los grandes planos, como el volumen saliente revestido en piedra de tenues colores marrones y cremosos. En un segundo plano, una larga estructura atraviesa el predio enmarcando la entrada principal y la terraza lateral. Finalmente, en un tercer plano un alto muro es atravesado por un ventanal vertical que ilumina el exterior al atardecer, como si fuera una lámpara de cristal. Una serie de planos horizontales cierran el conjunto en lo alto, enmarcando sutilmente la silueta sobre el denso panorama.

Una vista nocturna

No se sabe a qué hora es más tentadora la piscina, si a la luz del sol, para disfrutar de un bronceado delicioso, o al anochecer para vivir el glamour y la aventura a la luz de la luna. El diseño de la vivienda contempló cada detalle, desde los grandes volúmenes del conjunto hasta los pequeños elementos como las luces alrededor de la alberca, el jacuzzi y la forma en que el brillo de la luna deslumbraría por detrás de la casa. Cada destello es simplemente hechizante.

Para cerrar y enamorarse

Terminamos nuestro recorrido con la imagen de este bello rincón que concentra todo el diseño en un pequeño espacio: cada zona, cada elemento constructivo, cada vista, ventanal, dirección y textura fueron concebidos para hacerse uno con el paisaje, para disfrutar de él e integrarse. La casa es un ente vivo que respira al mismo ritmo que los árboles alrededor, que cambia de color como el cielo al atardecer, que ilumina con destellos plateados en la noche y se llena de radiante luz en el día. Esta casa es un homenaje al arte en que la arquitectura puede convertirse, siempre y cuando se conciba así desde el origen.

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