¡Que se haga la luz! Estrategias para ganar luz natural en toda la casa

Lorena Gomez Lorena Gomez
Umbau, Innenarchitektur Schucker & Krumm Innenarchitektur Schucker & Krumm Comedores de estilo moderno
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Las viviendas luminosas parecen escasear cada vez más en las ciudades. Pero ¡no todo está perdido!, en este libro les mostramos distintos recursos y estrategias para revertir este oscuro panorama y lograr ambientes luminosos.

Para vivir bien necesitamos de la luz tanto como del aire que respiramos. Si habitamos un departamento oscuro vale la pena tomar cartas en el asunto e implementar estrategias que nos permitan ganar luz, a como de lugar. Si estamos proyectando nuestra vivienda es el momento justo para pensar en la luz natural y convertirla en protagonista de nuestro proyecto.

Tengamos presente que un hogar luminoso mejorará sensiblemente nuestro ánimo y nuestra calidad de vida. ¡Vamos! que no hay tiempo que perder y sí mucha luz para ganar.

Ventanas, ventanitas, ventanales

Procuremos ventanas en todos los ambientes. De este modo nos aseguramos que, al menos en un momento del día, tendremos un rayo de sol en algún lugar de la casa.

Miremos las paredes y su orientación, busquemos el espacio con mayor potencial para captar luz natural e incluyamos aunque sea una pequeña ventana tipo raja; la diferencia que lograremos será notable.

¿Ya encontraron el lugar donde ponerla?, un vistazo a nuestra sección puertas y ventanas los va ayudar a encontrar la ventana de sus sueños.

Desde el cielo

Agotada la alternativa de las paredes nos queda elevar la vista y recurrir al techo. Las clásicas claraboyas o lucarnas y las ventanas para techos son muy buenos recursos que no solo nos permiten ganar luz, sino que aportan al ambiente un encanto especial.

Aunque nuestro departamento o el ambiente de la casa que querramos iluminar no esté en el último piso los nuevos sistemas de tubos de luz son una excelente solución. Hay varias marcas disponibles en el mercado.

Espacios abiertos

Otras veces la solución, en vez de agregar una ventana, puede ser derribar una pared y generar espacios más abiertos que capten la luz de otros ambientes. Además, las plantas libres y los espacios integrados generan una amplitud que favorece siempre la luminosidad.

Lo mismo sucede con la altura de los ambientes. Si estamos proyectando una nueva casa, ser generosos con las alturas nos va a dar una espacialidad muy agradable y también más posibilidades de luz.

En los ambientes con techos altos a menudo se instalan entrepisos para ganar unos metros más, muchas veces en detrimento de la luminosidad. Si optamos por esta alternativa hay que ser cuidadosos con el diseño para evitar el efecto cueva y que nuestro ambiente pierda en luz lo que ganó en superficie.

Paredes transparentes

Si bien en muchos casos esta opción es inviable, también es cierto que en muchos proyectos donde podría llevarse a cabo no se la tiene siquiera en cuenta.

Es que cuando hablamos de paredes pensamos de inmediato en un muro, sólido y opaco, en el cual se incluirá una ventana. Pero esto no tiene que ser necesariamente así: vean la pared vidriada de esta espectacular residencia en Nordelta, a cargo del estudio Ramirez Arquitectura.

¡Nos encantó!

Replicar la luz

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Es más que sabido: los espejos reflejan la luz. Colocar espejos frente a una ventana nos permitirá multiplicar la luz natural que entra al ambiente y potenciar su efecto.

Hasta aquí, recursos y estrategias para captar toda la luz natural que nos sea posible. Ahora bien, una vez que logramos traer la luz dentro de casa lo que tenemos que lograr es que el diseño interior y la decoración potencien el efecto de cada rayo de luz y nos ayuden a crear ambientes luminosos.

El rol del color

Los colores claros tienen la cualidad de reflejar la mayor parte de la luz a la que están expuestos, en contraste con los colores oscuros que lo que hacen es absorberla. Es por esto que para incrementar la luminosidad de nuestros ambientes debemos preferir los colores claros; especialmente en paredes y techos. Si la luz escasea también convendrá usar colores claros en muebles, cortinados y accesorios.

Cuando hablamos de colores claros es importante destacar que no se limitan a los tonos suaves; colores intensos y saturados como el naranja, el amarillo y el verde manzana, por ejemplo, son muy luminosos y pueden ayudar a transformar radicalmente un ambiente oscuro, sobre todo si se los combina con blanco.

Textiles con luz propia

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Además de preferirlos en tonos claros, de acuerdo a las sugerencias descriptas en materia de color, hay algunas recomendaciones a tener en cuenta respecto de las texturas y los estampados.

Los géneros ligeros y vaporosos, como los voiles y las gasas van a matizar la luz natural sin bloquearla, por eso son una muy buena opción para las cortinas.  Además, al tratarse la luz de un elemento sutil e intangible, la sensación que provoca un género liviano se va a asociar más fácilmente a la luz que una tela gruesa y pesada.

Si el estilo del ambiente lo permite, telas brillosas como satenes y sedas pueden contribuir también a resaltar la luminosidad. En este caso, ¡atención!, sólo en tonos claros y suaves. 

En el caso de los estampados podemos optar por diseños geométricos, floreados liberty, rayas o lunares. Como regla general: evitar el contraste de colores en la estampa y preferir en cambio las combinaciones de colores armónicas; si incluyen blanco o crudo, mejor.

Para continuar profundizando en este apasionante tema de la luz en el diseño interior les recomendamos seguir con nuestros consejos para iluminar con estilo cada uno de tus ambientes.

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