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En el libro de ideas de hoy hablaremos sobre reciclaje de basura y cómo empezar a aplicarlo en casa.
El reciclaje no es otra cosa que el proceso de convertir desechos en nuevos productos o en materia para su posterior utilización. Este proceso es una forma maravillosa de preservar materiales útiles al reducir el uso de materia prima.
Seguramente habrán escuchado hablar de las 3R
: reducir, reutilizar y reciclar. La finalidad de las famosas 3R es la de hacer un consumo más ecológico y consciente de los recursos naturales y reducir la fabricación de objetos hechos de plástico u otros materiales que contaminan el medio ambiente y que tardan muchísimos años en autodegradarse.
Para empezar a entender el proceso del reciclaje, debemos en primer lugar conocer los materiales reciclables. Estos incluyen vidrio, cartón, papel, materiales ferrosos y no ferrosos, telas y textiles, maderas y componentes electrónicos.
La forma más simple de implementar el reciclaje en casa, es separando los desechos en distintos contenedores. Existen códigos de colores cuyo uso es muy extendido en centros urbanos. Así tendremos por ejemplo el contenedor amarillo para todo tipo de envases, el contenedor azul para papel y cartón, el contenedor verde para productos hechos de vidrio, el contenedor gris para desechos orgánicos y biodegradables, el contenedor colorado para desechos peligrosos como baterías o insecticidas, el contenedor naranja para aceite de cocina usado y el contenedor naranja para medicamentos caducados, incluyendo los envases.
Si tanta especificidad nos resulta demasiado complicada, un buen comienzo es separar los desechos en húmedos u orgánicos y en desechos secos como plástico o latas. También es recomendable usar productos con recipientes retornables, el medio ambiente nos lo agradecerá.
La práctica del reciclaje es de vital importancia y en casas con chicos les ayudará a crear consciencia de la responsabilidad que tienen para con el planeta.
Los productos orgánicos como frutas o vegetales y otros restos de comida son altamente biodegradables y pueden ser reutilizados como abono o compostaje. Resulta por ello criminal mezclarlos con otro tipo de desechos donde irán a parar a silos en lugar de ser reutilizados como alimento para las plantas. Acá les acercamos otra toma de esta cocina maravillosa.
El segundo paso después de separar los desechos orgánicos es la práctica del compostaje, que consiste en mezclar compuestos que formaron parte de seres vivos en un conjunto de productos de origen animal y vegetal para su posterior descomposición. El resultado es un magnífico abono orgánico para la tierra y una reducción significativa de la basura. Hablando de vegetación y espacios exteriores, les compartimos un libro de ideas para llevar el jardín a otro nivel para llevar el jardín a otro nivel.
La manera más sencilla de separar los desechos húmedos de los secos, es incorporar dos contenedores uno junto al otro para depositar los depósitos donde corresponde. Cuánto más cómodos y prácticos sean los contenedores, más fácil será mantener nuestras verdes
intenciones. Por otro lado es cada vez más extendido el uso de contenedores humedos
y secos
en pueblos y ciudades, así que al momento de deshacernos de las bolsas cada uno irá a parar a su respectivo contenedor.
Este ejemplo nos muestra cómo disponer de los desechos orgánicos de una forma bastante glamorosa. La ventaja de este diseño es su practicidad, ya que sólo tenemos que levantar una tapa y disponer de los desechos que irán a parar al tacho escondido abajo del agujero.
La visión de los contenedores o tachos no es especialmente agradable. Es por ello que es preferible ubicarlos en alacenas cerradas y optar por contenedores de plástico que sean herméticos de ser posible, lo cual mantendrá a raya los malos olores.
Los recipientes de vidrio pueden reusarse hasta que se rompan. Es por ello que recomendamos conservarlos en lugar de desecharlos y reutilizarlos para guardar sal, café, salsas y dulces en conserva y pare usted de contar. La reutilización es una parte integral del reciclaje. La cocina de la imagen es del Estudio Paula Herrero Arquitecta.
